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Sociedad Bilbaina

La etapa de la Plaza Nueva

Años posteriores

Por fin, en la junta del 29 de enero de 1908, se propuso estudiar definitivamente el traslado de sede. En esa misma cita, D. Pablo García Ogara fue elegido nuevo presidente de la entidad. La propuesta tomó fuerza y, en la reunión que se celebró el 28 de febrero de 1909, se nombró a una Comisión Técnica para que se encargara de seleccionar los mejores emplazamientos posibles. 

El uno de octubre de ese mismo año, se resolvió el concurso para decidir el diseño del edificio y sus dependencias interiores. De todas las propuestas, se seleccionaron tres y, finalmente, se escogió la presentada por D. Emiliano Amann que, con ligeras modificaciones, es la que se construyó. 

En mayo de 1910 se colocó la primera piedra de la nueva construcción, y las obras se iniciaron en el mes de octubre. El extraordinario edificio que se puede contemplar hoy, tardó en completarse dos años y medio. La obra se dio por terminada el 24 de enero de 1913. 

 

Ahora bien, durante los 75 años que permaneció en la Plaza Nueva, la Sociedad Bilbaina fue testigo de importantes acontecimientos. 

La Segunda Guerra Carlista (1846-1849) no afectó prácticamente a Bilbao y, por ende, tampoco a la Sociedad Bilbaina. Sin embargo, en la Tercera Guerra Carlista (1872-1876) la ciudad sufrió un asedio terrible por parte de las fuerzas del pretendiente carlista. Este sitio, que era el cuarto de los padecidos en las Guerras Civiles del siglo XIX, se extendió desde el 28 de diciembre de 1873 hasta el dos de mayo de 1874. Durante el tiempo que duró el asedio, los socios solicitaron que se blindaran dos salas del piso alto para poder acudir a la Sociedad Bilbaina sin estar expuestos al bombardeo. A pesar de ello, el impacto de un obús destruyó la mesa de billar, uno de los símbolos más firmes de la Sociedad Bilbaina. La mesa fue reparada de inmediato. 

Al club bilbaíno también le tocó vivir a lo largo de esta etapa hechos históricos relevantes como la revolución de febrero de 1848 (relevante en toda Europa, pero especialmente en Francia con la caída de la monarquía); la Guerra de Secesión en Estados Unidos (1861-1865); el golpe de Estado que destronó a Isabel II en 1868; la Guerra de Cuba (1868-1878); la Guerra Franco-Prusiana (1870-1871); la pérdida de las colonias en el 98; la Guerra de los Boers en Sudáfrica (1899-1902); o la ruso-japonesa (1904-1905). 

Pero no todo lo que sucedía era negativo, ni mucho menos. La Bilbaina fue testigo de excepción de una de las épocas más brillantes en la vida de la Villa. Bilbao experimentó en esas décadas finales de siglo el más espectacular impulso económico, social y cultural de sus cientos de años de historia. 

Y ya por lo que respecta a los acontecimientos de carácter interno vividos por la Sociedad Bilbaina, a continuación se presenta un resumen cronológico con alguno de los más destacados. 

Y ya por lo que respecta a los acontecimientos de carácter interno vividos por la Sociedad Bilbaina, haremos un escueto resumen cronológico, para no alargar la lectura.

Se funda la Sociedad Bilbaina. Primer reglamento (18 artículos). Primera Comisión Directiva, a renovar cada año. Primer Presidente: D. Máximo Aguirre.

Primer presupuesto de Biblioteca. Primer Catálogo de Libros.

Primeras correspondencias con otros Clubes (Logroño, Pamplona y Vitoria).

Se decide llevar la administración directamente y no volver a arrendarla.

Primer Baile en la Sociedad Bilbaina.

Se eleva la cuota a 5 pesetas al mes (con pago trimestral). Bilbao se encuentra sumido en una terrible epidemia de cólera morbo.

Se superan los 500 Socios.

Renovación a fondo del mobiliario y demás enseres

Pavoroso incendio en la calle del Correo. Al hundirse el edificio, mueren muchos bomberos. Entre ellos, su jefe, el arquitecto D. Antonio Echániz. La Sociedad Bilbaina encabeza los socorros a los familiares de las víctimas.

Segundo Reglamento, con 34 artículos. La principal novedad es que se permite comer en la Sociedad, cosa que prohibía expresamente el art. 11 del Reglamento Fundacional.

Fiesta Náutica en la Plaza Nueva en honor de Amadeo de Saboya.

Se convoca una huelga de mozos que la Sociedad Bilbaina resuelve favorablemente.

Se realiza una reforma completa de los locales.

Quedan abolidas y prohibidas las propinas

Se crea la figura del vocal bibliotecario. Hasta entonces se encargaba de ello el secretario. El nuevo cargo recae en D. Carlos de la Plaza y Salazar. Se edita un nuevo catálogo de libros con cerca de 1.000 títulos.

Se aprueba el Tercer Reglamento de la Sociedad Bilbaina.

La presidencia pasa a ser bienal. El primer Presidente en la nueva situación es D. José Mª Arteche.

Se encarga a Adolfo Guiard, joven artista recién vuelto de París, la ejecución de tres grandes cuadros: La Terraza, Cazadores en la Estación de Abando y La Ría de Bilbao en Axpe

La Sociedad Bilbaina cumple sus Bodas de Oro. Su presiente, D. Hoffmeyer, inaugura el alumbrado eléctrico

Se establece el uniforme que han de vestir los mozos de la casa: casaca y pantalones verdes y chaleco a rayas verdes y amarillas

Se adopta el sistema de votación por bolas blancas y negras tras modificar el Art. 8 del reglamento de 1839. Se crea la Comisión de Admisión. Se instala en los locales la calefacción de vapor.

Se recauda entre los socios 63.967 pesetas para la suscripción a favor de la Marina de Guerra tras el desastre de Cuba y Filipinas.

Se instalan los primeros ventiladores eléctricos.

Se aprueba instalar un Salón Restaurante. Entra en la Bilbaina su más famoso chef, Alejandro Caverivière.

A la muerte del expresidente D. Tomás Gana, se acuerda poner la bandera a media asta cada vez que fallezca un socio.

Nuevo reglamento (86 artículos). Nuevo catálogo de libros con unos 2.000 ejemplares.

Proceso de cambio de sede.