Estimados Socias y Socios:
El Día D (D-Day)
Con ese título no quiero referirme aquí al 6 de junio de 1944 (fecha importante para todo francés y correspondiente al desembarco de Normandía), sino al 8 de junio de este año, fecha propuesta por nuestro Gobierno de la Nación para el Día Después, cuando se supone que vamos a poder hacer una vida casi normal (¡fase 3 de la “¡Nueva Normalidad”, término usado también en los años 40 por el gobierno nazi !!!) y que el aforo en muchos lugares pueda ser del 50%. Acercándonos a esa fecha, me surgen muchas dudas, preguntas…
¿Qué será de nuestra Sociedad y en particular de sus socios y personal: cuántos habrán sido afectados por la pandemia y a quiénes volveremos a ver o no?
¿Cómo será el retorno a nuestra Sociedad y cuáles serán las medidas a adoptar en los salones, comedor, gimnasio…?
Al final, muchos problemas que resolver para nuestra directiva y nuestros empleados, y no tengo dudas de que lo harán de la mejor manera.
Será también, en ese Día D, el momento de empezar a reflexionar y preguntarnos qué hemos aprendido de esa dolorosa experiencia. Hacer un “Think Tank” entre los miembros de nuestra Sociedad que pueda también servir a la sociedad vasca y española en general. Aquí me surgen varios temas que nuestros políticos tendrán que tener en cuenta para el bien de todos frente a este tipo de pandemia:
- La independencia sanitaria. Es obvio que en el futuro no podremos estar pendiente de un país (China) para nuestro abastecimiento en mascarillas, batas, guantes, respiradores, test de detección, fármacos… Tendremos que potenciar y/o desarrollar I+D+i para que estos productos puedan competir a nivel de coste con productos chinos (automatización de la fabricación, innovación en productos con textiles bactericidas, en fármacos, test…). Un ejemplo claro son los test PCR desarrollados por un investigador Ikerbasque de la UPV/EHU que demuestran que innovación y bajo coste no son incompatibles (15 € por test).
- Un plan sanitario creíble y efectivo. Alemania planificó en 2012 un plan sanitario contra una posible pandemia a partir de una simulación por expansión de un virus asiático (“Medi SARS”). La Canciller Merkel no ha hecho otra cosa que seguir ese plan en espera de una vacuna y tratamiento eficaz. Y añadió una medida más, la realización de 200.000 test diarios para tener la información necesaria con más precisión. Saber anticipar estos acontecimientos es un tema clave, pero parece que en España hemos avanzado con los ojos tapados.
- La importancia de Internet. Con la pandemia, el uso de Internet se ha disparado. Rápidamente hemos cambiado la oficina por el teletrabajo, las clases online, las videoconferencias por Skype, las compras… Esa herramienta se ha vuelto indispensable pero una parte de la población no sabe o no tiene acceso a ella. Un plan de desarrollo es imprescindible para formar, dar acceso, asegurar el intercambio de datos y llevar internet y el 5G, con una banda ancha suficiente, a todos los lugares del país.
- Las nuevas formas de negocio. Esta pandemia ha demostrado la importancia del comercio online, de los comercios de proximidad, de las compras directas al pequeño productor… Las iniciativas para ayudar al desarrollo de páginas web para esas pymes y trabajadores autónomos deberán multiplicarse. Es también una manera de garantizar precios decentes a los productores sin incremento para el consumidor, con soluciones que desarrollar para limitar el impacto ambiental del reparto (incremento del uso de furgonetas eléctricas en las ciudades…). Aquí también será necesario un plan de actuación a nivel autonómico y nacional para coordinar esas iniciativas y nos permita salir de esta crisis económica.
- El impacto ambiental. Por un lado, se han incrementado nuestros desechos domésticos y sanitarios, pero, por otro lado, ha disminuido la contaminación por CO2 un 25% y por NOx un 65% así como la contaminación acústica. ¿Seremos capaces de seguir por ese camino? Esta experiencia provocará un cambio positivo en la forma que muchos consumidores y personas perciben y contribuyen a las iniciativas ecológicas, demostrando que la protección de los ecosistemas es el primer nivel de regulación de las pandemias.
Estas son algunas de las preocupaciones que tengo con cara a nuestro futuro… y habría muchas más cosas que decir pero que podremos debatir en Nuestra Sociedad Bilbaina…
En su carta, nuestro socio D. Pedro Luis Uriarte, nos hablaba de ese “cisne negro” que ha sido esa pandemia que no esperábamos, y concluía con la necesidad de una transformación de nuestra sociedad. Es una visión que comparto. Es tiempo de cambios profundos. Posibilidades y soluciones hay muchas, solo he enumerado unas pocas (no he entrado en la parte económica e industrial). Lo importante es ahora detallarlas en un plan de actuación donde la sociedad civil, y no solo los políticos, tenga algo que decir. Cuanto antes tengamos ese exigente proyecto de transformación más pronto saldremos de ese mal paso. Y no dudo que, en nuestra Sociedad Bilbaina, habrá muchos socios con buenas ideas para alimentar ese “Big-Bang” que necesita nuestra comunidad autónoma y nuestro país en general.
Ya se aproxima el Día D. Mientras tanto, tener paciencia durante este último mes y cuidaros para poder disfrutar de ese Día en nuestra Sociedad Bilbaina.
Franck Girot Mata
SOCIO, INVESTIGADOR IKERBASQUE EN LA ESCUELA DE INGENIERÍA DE BILBAO (UPV/EHU)
Y CATEDRÁTICO POR LA ESCUELA DE INGENIEROS ARTS ET METIERS SCIENCE ET TECHNOLOGIE (BURDEOS Y PARÍS)